Indemnización por perjuicio estético

Tras un accidente de tráfico nos centramos en la indemnización correspondiente por las lesiones y secuelas sufridas. Sin embargo, en muchas ocasiones nos olvidamos de la indemnización que debemos recibir por el  perjuicio estético.

El perjuicio estético se refiere a las marcas o cicatrices que pueden surgir tras sufrir lesiones en un accidente de tráfico.

El nuevo baremo de indemnizaciones por lesiones recoge el perjuicio estético y le otorga el mismo tratamiento que a las secuelas. Es más, la indemnización final por secuelas estéticas acaba siendo incluso superior a la obtenida por secuelas funcionales ya que cuando concurren secuelas de perjuicio estético con las funcionales no se aplica la fórmula correctora, sino que directamente se suman.

Dentro del baremo se distingue en este apartado entre perjuicio ligero (1-6 puntos), moderado (7-12 puntos), medio (13-18 puntos), importante (19-24 puntos), bastante importante (25-30) e importantísimo (31-50 puntos).

La valoración del perjuicio estético llega a ser controvertida. Tanto es así, que hay quien distingue a la hora de fijar el grado de daño estético cuando lo padece un hombre que cuando lo padece una mujer. También se hace distinción con la edad de las personas.

Para que se pueda reclamar una indemnización por perjuicio estético sufrido en un accidente de tráfico, el perjuicio o daño estético debe ser irreversible o que se prolongue en el tiempo.

Muchas veces no se contempla en la documentación médica. Los médicos encargados de tratar al accidentando, no mencionan esas cicatrices o marcas en el parte médico o de alta. Posteriormente es complicado acreditar dichos perjuicios. Es muy importante que esta información esté contemplada, desde un principio, en la documentación médica.

Tuaccidente.com recomendamos que el lesionado se encargue de que el médico haga constar este tipo de daños y así poder reclamar la máxima indemnización correspondiente según el baremo de tráfico.

Recuerde que cobramos, siempre al final del proceso, con un porcentaje pactado al inicio y que además podrá recuperar mediante la defensa jurídica contratada en su póliza.